viernes, 7 de febrero de 2014

Cuarta semana de viaje

Hola! amigos. Qué tal?

Bueno, hoy la idea es contarles lo que me ha pasado en esta semana, especialmente porque es la última de un viaje de inmersión por psiquiatría! Sí, así mismo, desafortunadamente han pasado cuatro semanas de alegrías, sorpresas y hasta tristeza; en donde he aprendido a identificar patrones de enfermedades mentales y sobretodo pacientes que padecen de ellas. Ha sido algo gratificante porque logré un objetivo más dentro de mi carrera. La curiosidad que inicialmente tenía acerca de que sería psiquiatría, cómo me serviría y demás, se resolvió. Desde la teoría del examen psiquiátrico formal, hasta su aplicación con los pacientes contribuye enormemente a la familiarización con la psiquiatría, poder entrar en debates acerca del abordaje clínico del paciente y poder crear lazos de amistad con ellos son experiencias únicas.

Es tal el caso del paciente que les comenté en la entrada anterior, hace poco lo vi, y la alegría junto con algo de orgullo fue lo que sentí mientras él sonreía. Es sencillamente una muestra, que aunque poco ayudé, en algo sirvió. Con eso reafirmé mi pensamiento de que no es tanto tener 100% aptitud, sino la actitud que se le imprime a cada acción. Es fundamental estar dispuesto a escuchar y entender cada historia, tratar de colaborar en lo que más se pueda y seguir en el camino de hacerlo bien desde la primera vez. En términos generales, este viaje largo pero fascinante, es recomendado para todo aquel que quiera emprenderlo, sin duda alguna tendrá emociones fascinantes en el camino.


¿Tendrá algo de especial esta imagen con respecto a la psiquiatría? Yo creo que sí y mucho, desde el primer plano hasta la diversidad de colores que se observan al fondo. Algo así es la psiquiatría, un conjunto de partes que al juntarse producen una espectacular imagen, que dan ganas de querer estar ahí, querer sorprenderse por lo maravilloso, guardar el recuerdo y decir eso lo viví yo!



Y bueno, aquí vamos en el proceso de ser una fuente de vitalidad para los demás, con ganas infinitas de ayudar y emocionarse cada vez que se ve la mejoría en lo pacientes. Enhorabuena amigos, estas cuatro semanas de viaje, tienen con seguridad solo adjetivos positivos. Para mis compañeros que emprenderán su viaje y para ti que has tenido la oportunidad de leer esto, éxitos! que logren tener un viaje tan o más fantástico que el mio.

Que estén bien y viajen confortablemente! :D


PD: Les comparto una lectura acerca del papel del paciente con la formación del estudiante. Importante: http://www.valledellili.org/sites/default/files/files/carta_de_la_salud_enero_2014.pdf

miércoles, 29 de enero de 2014

Sano en casa... Depresión en el hospital

Hola amigos, cómo andan? 

Les cuento, hoy escribiré acerca de un caso especial, de esos un poco inesperados que por situaciones un tanto dolorosas o tristes conllevan a una serie de eventos, y tienen escrito su desenlace. Sí, es así como lo leen. En este caso podremos detallar como la psiquiatría se convierte en un área integral; donde es fundamental conocer en profundidad la historia de cada paciente, involucrase en cada hecho por más mínimo que sea, entender y tratar de imaginarse la situación actual del paciente, etc.

Esta es la historia de un hombre de 44 años. Su niñez transcurrió entre visitas al médico, pasión por el futbol y entender lo que le pasaba. Pasó el tiempo, hasta que llegó el momento de pensar en el amor, su deseo por encontrar una mujer se vio frustrado porque no lograba acoplarse a las “necesidades del mercado”, su enfermedad no lo dejaba avanzar a pasos grandes. Paso su adultez en compañía de sus padres, desafortunadamente como ley de vida, la muerte llegó para ambos y a partir de ahí, hubo un cambio radical en la vida del señor.

Lo conocí un sábado a mediados de mes, había llegado a la clínica a inicio de mes por una crisis drepanocítica, tenía diagnosticada anemia de células falciformes. Fue un episodio fortuito, una interconsulta de parte de hematooncología porque lo habían notado triste y con mutismo. Inmediatamente pensé, que extraño, qué le podría estar pasando para tener esa actitud hasta el punto de no querer hablar.

Comencé por preguntarle - ¿cómo está señor, cómo le ha ido? – Bien, respondió con un tono cansado de la voz. Seguí indagando para descubrir el porqué de su actitud. –Me han contado que ha estado triste, le dije. Me miró, y me dijo –Sí, un poco, estoy aburrido. Proseguimos con la entrevista y descubrí hechos abrumadores.
Tenía múltiples antecedentes: anemia de células falciformes, cirrosis secundaria a sobrecarga de hierro, falla renal crónica y síndrome de hipertensión portal. Lo último, un hematoma epidural de C7 a T5, sucedió durante la hospitalización. Empezó por perder la fuerza en sus piernas, perdió la sensibilidad y finalmente ya no pudo mover sus piernas. Eso lo tenía muy preocupado “no sé si voy a volver a caminar” comentó con lagrimas en sus ojos.

Rápidamente me di cuenta que no era un caso como los demás. Este, en especial, tenía algo diferente. Una hospitalización estaba causando una posible depresión, pensé. Identifiqué sus síntomas cardinales y cuadraba casi perfectamente. Comenzando con preocupación, tristeza, llanto fácil hasta insomnio, ideas de desesperanza e ideas de muerte. Desde la muerte de sus padres, todo había cambiado – Me siento solo, tengo dos hermanas pero no me la llevo bien con ellas. En total tiene 4 hermanos; dos mujeres y dos hombres, estos últimos viven en el exterior y la comunicación no es constante. En definitiva él era un hombre solo.

Pasaron algunos minutos, concluyó la entrevista y salí a comentar al paciente con mi profesor. Pensaba muchas cosas, entre esas, qué pasaría con el paciente. Ahora, yo tenía un poco de preocupación, quería evitarle a toda costa algún tipo de sufrimiento. En la revista, se decidió iniciar psicoterapia, manejo farmacológico y consulta con trabajo social. Estaba satisfecho con la decisión, y ya lo único que restaba era esperar.

El lunes volví a visitarlo; estaba un poco mejor, con mejora de su sintomatología. Hablaba un poco más, refirió haber dormido y comido bien. No pude contener mi alegría, este paciente había sido especial. Por primera vez, había entendido tan bien lo que padecía el paciente. Ya para concluir, creo que con este caso me enriquecí de conocimiento, y lo más importante logré valorar aun más el área de psiquiatría, entendí como se logra influir positivamente en alguien y con eso poder mejorar su calidad de vida.

No siendo más amigos lectores, me queda pedirles que reflexionen sobre este caso. Identifiquen aspectos clínicos para llegar a un diagnóstico y además logremos valorar como un “buen viaje por psiquiatría” contribuye en la mejoría de los pacientes.

Saludos!

:D

martes, 21 de enero de 2014

Hablemos de adaptación...

Hola amigos. ¿Qué tal su semana? 

Hoy quiero hablar acerca de un tema interesante que leí hace poco, de esos que son curiosos y a la misma vez preocupantes, atractivos y oscuros, sanos y enfermizos... en fin un sin número de adjetivos, que permiten disfrutar cuando se lee del tema. Decidí nombrar a esta entrada hablemos de adaptación, porque quizá en algún momento de nuestras vidas, hemos pasado por una situación que nos ha afectado, y hasta en cierto grado nos haya causado sufrimiento, pero con la ayuda de conocidos, amigos, consejeros, médicos o tal vez reflexionando hemos podido de una u otra forma adaptarnos a esos factores "agresores".

Es así, como en este diálogo con ustedes, empezaré por comentarles lo que sé acerca del llamado trastorno de adaptación. Se preguntarán ustedes a que me refiero. Podemos definir el trastorno de adaptación como una respuesta emocional ante un episodio estresante típicamente una enfermedad médica, problema familiar o económico. 
Debemos entender la respuesta emocional como un síntoma o conjunto de síntomas que van desde un espectro ansioso hasta el espectro depresivo, presentándose así: preocupación, angustia, insomnio, o tristeza, llanto, irritabilidad, etcétera; por otro lado, pueden haber conductas inadecuada como incumplimiento de la ley, consumo excesivo de alcohol o en extremo conducta suicida.

Respecto a la etiología (causa del trastorno) y factores desencadenantes, se ha descrito que se da por uno o más factores estresantes, y dependerá de la 1) naturaleza del mismo; 2) significados conscientes e inconscientes del estresante y 3) la vulnerabilidad del afectado, para que probablemente se desarrolle el trastorno. 

Para amplificar de manera resumida múltiples aspectos del trastorno adaptativo (como también es conocido), dejaré en la parte de abajo un vídeo en donde explican algunas características del mismo.


Bueno amigos, espero continuemos en diálogo sobre este tema.
¡Éxitos!

lunes, 13 de enero de 2014

Delirium

Hey!!
Hola qué tal amigos lectores. En esta nueva entrada, adentrándonos en el viaje por psiquiatría, el primer tema que trataré hoy, será delirium... Eh sí, delirium ¿Sabes a que me refiero cuando digo delirium? Bueno, si la respuesta es no, tranquil@, hasta los médicos con más experiencia preguntan ¿Qué es eso? con voz de extrañeza.

El delirium, sindrome confusional agudo o síndrome cerebral orgánico es, según el CIE 10, un trastorno que carece de etiología específica, caracterizado por la presencia simultánea de trastornos de la conciencia y atención, de la percepción, del pensamiento, de la memoria, de la psicomotilidad, de las emociones y del ciclo sueño-vigilia, frecuente en personas mayores de 60 años. En otras palabras, es un estado transitorio de "insuficiencia" cerebral frecuente en personas de mayor edad, normalmente tiene un comienzo súbito y hay fluctuaciones diurnas de los síntomas y la duración total del trastorno debe ser inferior a los seis meses. Se ha asociado a trastornos no mentales (orgánicos) que conllevan a la falla del SNC. 

Para poner en contexto el término, expondré un caso clínico. Se trata de un paciente octogenario, con antecedente de trasplante renal, quién asiste a control y durante la evaluación, los familiares comentan que lo han notado confuso, agitado y ha presentando insomnio durante varios días; es valorado por el servicio de psiquiatría donde se da impresión diagnóstica de estado confusional agudo secundario a alteración renal de base, se inicia manejo con quetiapina con la cual mejora su cuadro clínico.

Para terminar amigo lector, observe según la definición, como el paciente del caso clínico concuerda con el diagnóstico de Delirium. 

En otra entrada comentaré aspectos que ayudan en el diagnóstico del mismo estado. 

Saludos.







¿Viaje por psiquiatría? ¿Cómo así?

Cali, 13 enero 2013

Hola!
Amigo lector, me alegro que leas esta primera entrada.

Me presento: nací en Cali, viví en Buenaventura, veintiañero, estudiante de medicina, actualmente estoy en séptimo semestre en la Universidad Icesi en Cali, Colombia. Con múltiples aficiones, por citar algunas la aviación, lectura, dulces, entre otras.

Bueno, por otra parte, empiezo por contar que este blog no es una motivación propia, nace a razón de una rotación médica en la cual me encuentro y como medio de comunicación con nuestro profesor (un amante de la tecnología), decidimos crear una herramienta tecnológica para ese objetivo; así, como es de esperar, registraremos con varias entradas nuestro "viaje por psiquiatría". La idea es comentar temas de interés propio (claramente de salud mental), casos clínicos, curiosidades de psiquiatría y actividades grupales relacionadas con los temas vistos durante la rotación

Ya para terminar y escribir menos :) ... Espero sigan el blog y entre todos viajemos por psiquiatría.

PD: Les recomiendo vean el diseño del blog en zoom entre 75-80%